ONDAS MAGNÉTICAS: el transistor tricolor y sus triunfos del año

El ámbito radial no ha dejado de registrar movimientos importantes en este año 8 del nuevo siglo: en relación a la compra contundente que Prisa hizo de varias emisoras, Radioactiva cambió otra vez de dial, W pasó a llamarse ADN y la filial de Los 40 Principales se fusionó con FM Hit para convertirse en Hit 40; en Dial, el consorcio manejado por COPESA, cerraron Club FM y la cambieron por Paula FM, estación que aborda contenidos femeninos relacionados con esa revista (también Cariño pasó a mejor vida); se crearon dos radios dedicadas a la música local: primero fue, en AM, La Perla del Dial, y poco después una de la que hablaremos más tarde; Zero nos mostró a un Fernando Mujica que apostó por alargar su histórico programa ALTA FIDELIDAD a ¡cuatro horas!, pero tal experimento fue suprimido en poco tiempo; en la archinombrada Rock & Pop, aquella "venganza de la gente normal" dio paso a un éxodo de voces, a que Sergio Cancino sea el nuevo director, y al regreso de Rolando Ramos. Entre tanto cambio, tanta fusión o tanta (posible) decepción, la lista de los 5 mejores programas de 2008 (con mención de extrañamiento a la cola) es la que sigue:

1º HACIENDO PATRIA (Radio Uno)
2º ESTUDIO UNO (Radio Uno)
3º EL SHOW DE LOS DISCOS (Radio Uno)
Digámoslo con todas sus letras: lo mejor que le pudo pasar a Chile este año es tener una radioemisora FM dedicada 100% a los músicos de aquí. ¿Es necesario discutir todavía una norma que obligue a cada señal a pasar un porcentaje de canciones nacionales, hacer que se proponga en el Congreso, insistir más en ello? Para nada: se tendría que pasar por encima de las segmentaciones correspondientes. Basta con amar a Radio Uno, gran hito en el cual destacan 3 espacios. HACIENDO PATRIA, conducido por Natalia del Campo cada domingo, invita a artistas y teóricos para hablar de sus historias, y de las que merecen ser descubiertas, apuntando hacia el Bicentenario. ESTUDIO UNO, por su parte, toma el relevo de lo que eran las Raras Tocatas Nuevas de Rock & Pop: allí se exhiben sesiones exclusivas con el mejor sonido, presentadas por Sergio Lagos, Blanca Lewin o Lucho Hernández. Y el otro Sergio, Cancino, a través del SHOW DE LOS DISCOS (ingenioso guiño al Show de los Libros que Antonio Skármeta mantuvo en TVN), profundiza en álbumes y canciones, según la actualidad o las afinidades temáticas, todo en un estelar estimulante. Sí señor: oro, plata y bronce para Radio Uno en su salida a la luz.

4º RUTA 66 (Rock & Pop)
Como ya decíamos, Rolo Ramos volvió a posar su voz en el micrófono de esa emisora nacida en 1992, específicamente para hacer dupla con el Doctor Zombie en el imaginativo CLANDESTINO, presentar las novedades en singles vía el microprograma AVANZADA, y para hacerse cargo de una carretera perdida en medio de un desierto poblado por más zombies, esqueletos y seres extraviados, al ritmo del rock más primitivo, las raíces mismas de un género que nunca ha muerto. Un viaje infaltable para los que desean saber qué sonidos buscan hacerse un sitio en los oídos más abyectos, desde la década 50, hasta quienes mantienen el espíritu siniestro hoy.

5º MÚSICA DE MEDIANOCHE (Beethoven)
Lo destacamos como el mejor programa del año pasado, y durante el que está por terminar mantuvo su status. Sergio Díaz no paró de agasajarnos con sonidos que se conocen bien por dentro, y otros más ocultos todavía. El ciclo shoegazer (con especial atención a Slowdive, Kitchens of Distinction, Ride, The Jesus and Mary Chain y My Bloody Valentine, fuera de agregar a los peruanos Resplandor), y el de músicos chilenos que Rodolfo García comisionó, fueron claves a la hora de ennoblecerse.

Mención Especial:
RANDOM (Horizonte)
Pasa lo mismo que con Conspiración Copano, pero con la diferencia que fueron 4 meses los que Verónica Calabi y Vicente García-Huidobro (Tanderal Anfurness en Akinetón Retard, ya saben) tuvieron a su disposición para levantar un sitio con más preguntas que respuestas, como rezaba la presentación, donde los datos duros que revisaba la ex Mekano y la bendita locura de Vicho causaban una felicidad tan cercana a la que uno podía sentir en los tiempos de Sandía. Juntos fueron como Nacho Vegas y Christina Rosenvinge, potentes en lo suyo y unidos también. Ojalá vuelvan a compartir un locutorio...