MINIMALIAS Y MAXIMALIAS: Last.fm nos deja a media máquina (a menos que paguemos, mierda)

Es algo que se venía anunciando hace rato: Last.fm ha comenzado a restringir sus funciones para sus usuarios que no residen en Estados Unidos ni en algunos países de Europa. Ahora, para escuchar cualquier emisora, incluidas las de recomendaciones, colección personal y de los amiguis que uno tenga, hay que pagar US$ 3 mensuales. Ahí se me complica la cosa, ya que no tengo computador en casita, y siempre uso los servicios de los típicos locales para mantener mis cuentas virtuales. Me quedo cojo. A mi jodido eclecticismo le hace mal no poder acceder gratis a mucha música tan diversa, y más si llevo un año como usuario de Last.fm. Justo hoy quería partir mi búsqueda con Oasis, por ejemplo. Lo bueno es que puedo por lo menos seguir escuchando los temas gratuitos que he pinchado durante este tiempo, pertenecientes a gente como: Ruch, Teleradio Donoso, Denisse Malebrán, Femmepop, Merzbow, Giardini di Mirò, Polter, Zu, Les Ondes Martenot, Los Ex, Black Lips, The Lovekevins, etc.. Ya lo decían los Rolling Stones: You can´t always get what you want...