CAJA MALDITA: Cobre, poder y pasión

Lo que suele rondar por mi cabeza cuando reviso los capítulos de COBRE (Mega, lunes 22:30) es la idea de que bien pudo hacerse y exhibirse durante la celebración de nuestro Bicentenario como República de Chile. Esta serie, dirigida por Gustavo Graef-Marino, recordado por el filme noventero JOHHNY CIEN PESOS, tiene una puesta en escena muy parecida a la adaptación 2010 que el canal donde milita Kike Morandé hizo de ADIÓS AL SÉPTIMO DE LÍNEA, lo cual refuerza mi idea. Con locaciones como Antofagasta, Valparaíso, Santiago y la ciudad minera de Sewell, cerca de Rancagua, COBRE nos muestra la historia de la familia Serrano, gente que recibió unos terrenos de parte de Guillermo Blake (Bastián Bodenhöfer), los cuales aparentemente no valían nada, hasta que descubren que pueden extraer cobre de alta pureza, noticia que hace ¡click! en el espíritu ambicioso e infame de este empresario, que tiene una hija llamada Verónica (Ignacia Allamand), que al principio vemos como una niñita pataletera que reclama porque no le trajeron su revista, pero más adelante se perfilará, ay mamá, como una mujer que hará uso de su sensualidad para causar estragos en cada machote que se le cruce. Además de los ya citados, en esta miniserie histórica podemos ver a Cristián Riquelme, Francisco Gormaz, Antonia Zegers, Marcial Tagle, Jaime Omeñaca y Celine Reymond, entre otros actores. Valga anotar además que: 1) hay algunos focos efectistas en la historia, como el habla del hijo del personaje de la Zegers, españolito habituado a decir cosas como ¡me cago en la leche! (¿un clon acaso de David Bisbal? Hostias...), o esa persecución jamesbondiana donde uno de los Serrano arranca de un empleado de Mr. Blake; 2) el score tiene su gracia, más todavía el tema central, con guiño al clásico himno anónimo "The House of the Rising Sun", versionado a sus horas por The Animals y en español por Sandro; 3) es un gusto ver de nuevo a Bastián Bodenhöfer en pantalla, tras un período en el que se dedicó a ser panadero (en una nota de CHILEVISIÓN NOTICIAS lo supimos); y 4) la señorita Allamand sigue encantando, a fuer de ponerse en la piel de una mala una vez más, algo que tal vez la hace más sexona (espero con ansias en los capítulos venideros el momento en que a alguien le dirá: ¿Por qué no me dices que te gusto?); nunca imaginé babear por la hija del Ministro de Defensa, pero estaba escrito en el viento, je. Poder y pasión, reza el slogan de COBRE, y esos dos elementos mueven los hilos en una serie recomendable, en la franja prime del lunes. Y no se olviden quedarse después a ver SOLITA CAMINO. ¡Es una fucking orden, carajo!

http://es.wikipedia.org/wiki/Cobre_(serie_de_televisión)