MINIMALIAS Y MAXIMALIAS: no vayas al McDonald´s

Hay veces en que desconfiar de algo tiene sus basamentos. Qué mejor ejemplo que el de una mujer que fue a un local de McDonald´s por una hamburguesa, y terminó con un diente salido y otro quebrado, por culpa de una broca metida en el alimento. Hace poco salió un fallo que obliga a la compañía a indemnizar monetariamente por más de $2.000.000 a esta pobre fémina. Ellos tienen un protocolo de seguridad, pero en esa ocasión falló, por lo tanto no aplica que se hagan los lesos. Me considero detractor de McDonald´s y de cierta filosofía barata que consiste en creer a pie juntillas en la comida rápida, consumiéndola a diario y sin atisbar las consecuencias de esas prácticas. Ya, unas papitas o una hamburguesa no son malas de vez en cuando, pero no hay que besarle el culo a estas cadenas, por más que auspicien teletones, olimpíadas y mundiales de fútbol. Y más encima si a usted, que está leyendo esto, lo pueden cagar como a la mujer ya mencionada. Allá usted si quiere experimentar hasta ser obeso e hipertenso. A desconfiar.