20 noviembre, 2014

PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: tomando la acción por sus propias manos y agregando matices


MOGWAI
Rock Action
(Southpaw, 2001)

/AVANT ROCK/ Esta banda oriunda de Glasgow entraba al siglo XXI con su tercer álbum oficial. Tal como pasó en el extenso COME ON DIE YOUNG (1999), el productor es Dave Fridmann (también conocido por trabajar con The Flaming Lips, Mercury Rev, The Delgados y Café Tacuba, por nombrar algunos grupos), y hay un guiño a Iggy Pop; si en el predecesor se utilizaba la cuña de una entrevista dada por la Iguana (en "Punk rock"), aquí el título viene de una canción de Iggy, donde decía: I´m gonna take satisfaction/I´m gonna get rock action. Ese gesto hay que interpretarlo como la demarcación por parte de Mogwai de su voluntad particular, donde tomar por sus propias manos la "acción rock" significa no renunciar a sus inquietudes exploratorias ya mostradas en los trabajos anteriores y tratar de ampliar sus registros, de agregar matices acústicos y melódicos que no se alejen de su dirección. Curiosamente, este álbum estuvo a punto de llamarse "El disco de post rock más caro jamás grabado", una de las tallas que suelen echarse Burns, Braithwaite y los demás en la interna, pero al final ganó la opción concisa ya descrita. Aparecen en él dos invitados muy especiales. Uno es David Pajo, bajista de Slint, grupo norteamericano de culto que en su SPIDERLAND (1991) supo adelantarse a los aires postrockeros, presente para cantar en el instante más hermoso de ROCK ACTION, titulado "Take me somewhere nice"; de hecho los compases slowcoretas de verdad lo llevan a uno a un lugar grato. El otro es Gruff Rhys, vocalista de los galeses Super Furry Animals, quien se luce en "Dial: revenge", cuyo título es un juego de palabras muy atractivo: en los teléfonos públicos británicos, cuando se toma el auricular aparece en la pantalla la palabra dial, que significa "marque"; pues bien, esa palabra en gaélico también significa "revancha", por lo tanto según Rhys la canción tiene que ver con estar parado en un lugar desquiciado cuando uno hace una llamada. De todos modos allí hay otra muestra de belleza completa. 

El resto del disco presenta cosas como la postal de suciedad un tanto industrial "Sine wave", los 55 segundos pastorales de "O I sleep" (puestos justamente entre "Take me somewhere nice" y "Dial: revenge": todo calza), las tandas de regusto bien pegado habidas en "You don´t know Jesus" (pedazote de título) y "Secret pint", el minuto de confianza harsh noise en "Robot chant" y la trama a partes iguales melódica y tensa de "2 rights make 1 wrong", donde repite Gruff Rhys haciendo coros distantes. En ROCK ACTION, los escoceses prefirieron jugársela por variar la fórmula y salieron victoriosos. Rockdelux lo destacó como disco del año en esa temporada, sobrepasando a Expérience y The Strokes. Y Rockaxis lo puso en su lista de los 100 mejores discos de la década 00. Acción y reacción que siempre sabe resonar satisfactoriamente, la de esta escuadra que este sábado se presenta en el Movistar Primavera Fauna, festival a realizarse en Espacio Broadway.

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