16 febrero, 2009

PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: Vetiver, cosas del presente

Durante esta década, los oídos más exigentes han sido testigos de una reinvención en torno al folk: varios intérpretes, con el subrayado especial para Devendra Banhart y Joanna Newsom, se decidieron a recuperar las visiones perdidas, a la par que alucinadas, de gente como John Fahey, Judee Sill, Karen Dalton o Vashti Bunyan (esta última, la única sobreviviente del lote mencionado, quedó tan impresionada con que la reivindicaran, que se decidió a publicar su segundo disco, 25 años después del debut en 1970). Dentro de esta escena, motejada por los críticos como New Weird America, encontramos al señor Andy Cabic, líder de un proyecto llamado Vetiver, que cuando opera como banda-hermandad tiene de su lado al propio Banhart y a un par más de músicos. VETIVER (2004) y TO FIND ME GONE (2006), ambos editados por DiCristina, fueron sus primeros álbumes. Y ahora, tras las versiones de THING OF THE PAST (2008), aparecidas en Gnomonsong, label que Devendra mantiene, Vetiver quita el velo a una nueva decena de canciones, titulada TIGHT KNIT (Sub Pop, 2009). Según la hoja promocional en la web, este trabajo se acerca a lo que compondría George Harrison en medio de un campo soleado, si no hubiera muerto. No es descabellado: el ex Beatle es una presencia invocada durante algunos momentos, como "Strictly rule"; lo mismo pasa con Ben E. King, el autor de "Stand by me", cuando suena "Sister". La cuota ensoñada que aparecía en TO FIND ME GONE (¿se acuerdan del bello single "Been so long"?) es retomada en "Down from above" y "At forest edge". Más se inclina la balanza hacia el rock en "More of this", sin dejar cojo al resto del disco. "Another reason to go" va sobre el tópico de las frustraciones por estar en un jodido pueblecito, y ante el gris panorama la melodía es el refugio idóneo. "Rolling sea", el tema inicial, acaricia seguro de sí mismo, al igual que el álbum completo. En TIGHT KNIT, Vetiver no tienen nada de weird, pero de cálidos, hermoseados y completos, lo tienen todo. Cosas del presente que Andy Cabic, niño azul (si un largo de Devendra Banhart se llama NIÑO ROJO (2004), y la portada de este disco vetiveriano es azul, llamémosle así no más), vive. Y cómo lo vive.

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