PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: System Of A Down, contra la toxicidad

Queda como algo muy atinado que System of a Down hayan decidido retomar su camino, al menos en el acápite de conciertos, justo en un año donde TOXICITY (American/Columbia/Sony, 2001), trabajo decisivo por donde se le mire, cumple una década tras su prensaje. Y suena más digno que digan presente en Santiago de Chile, cosa que ocurrirá el 7 de octubre en el Estadio Municipal Bicentenario de La Florida.

Ahondando más en aquel TOXICITY, que para eso vinimos, álbum laureado por Rockaxis como el mejor de la década pasada, diremos que representa en todo su minutaje la intensidad, la concisión, el planteamiento claro de tópicos importantes, desde la óptica de unos ciudadanos norteamericanos de origen armenio como son Serj Tankian, Daron Malakian, Shavo Odadjian y John Dolmayan. Con una portada que se ríe del letrero típico de Hollywood (años más tarde insistirían en hablar de ese lugar, en dos temas del MESMERIZE (2005)), SOAD atacan sin cesar, logrando aportar matices frescos (¿será el acento?) a un metal que entre cotas guturales ("Prison song") y metrallas hardcore ("Jet pilot", "X", "Bounce"), no rehuye las posibilidades melódicas. Ni hablar de los escalofríos que produce la letra de "Deer dance" (Pushing little children,/with their fully automatics,/they like to push the werk around). Lo que expresa la citada "X" aparentemente tiene que ver con la repulsa a la clonación genética, mas si uno se fija bien apuntan mucho más a la histórica indignación por el silencio que Estados Unidos ha guardado ante los crímenes contra los armenios, a principios del siglo XX: Tell the people,/tell the people that arrive,/we don´t need to multiply. "Forest", por su lado, se refiere a la depredación de la Tierra y sus bosques convertidos en vino y/o en arena. "Psycho" aborda el peligroso sube-y-baja de las drogas, en especial la cocaína. "Aerials" es la cima poética de tintes filosóficos que Tankian y Malakian bordan con maestría (Life is a waterfall,/we´re one in the river,/and one again after the fall...), uno de los singles más conocidos de TOXICITY junto a "Chop suey!" (velocidad + dramatismo suicida) y el track titular, del cual cabe preguntar si System of a Down habían escuchado, fuese por las suyas o de casualidad, el "Summer" de Mogwai, ya que el inicio de "Toxicity" remite un poco a los postrockeros de Glasgow. Disco imprescindible con mayúsculas en todos sus surcos, los cuales saben dar la batalla a la toxicidad de nuestras ciudades, a la alienación científico-tecnológica ("Science"), a ciertas visiones estrechas de la vida. Como debe ser.

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