PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: hoy es el Día del Ramito de Violetas

El 9 de noviembre ha llegado. Y esa fecha a muchos les suena conocida, pues aparece en la letra de una canción. Hablo de "Un ramito de violetas", que en nuestras fronteras se hizo grande gracias a Zalo Reyes, el Gorrión de Conchalí. Ese hombre de origen humilde que tuvo la oportunidad de mostrar su registro apasionado, convirtiéndose en un personaje de alcance transversal, capaz de gustar a las periferias y a los sectores más acomodados. Así fue como en sus shows entregaba algo más que sus canciones: hacía como los estandaperos de ahora, mostrando cómo bailan los del pueblo y el modo de los cuicos. Valga el apunte en este Día del Ramito de Violetas: la canción honrada es una composición original de Evangelina Sobredo Galanes, más conocida como Cecilia (no confundir con nuestra Cecilia La Incomparable, de apellido Pantoja), aparecida en el disco justamente llamado UN RAMITO DE VIOLETAS (CBS, 1975). Esta Cecilia fue una jovencita nacida en un pueblo de Madrid como El Prado. Su carrera de cantautora fue exitosa, mas no exenta de problemas, ya que la censura franquista le censuró algunas de sus canciones, llegando a pedirle que les cambiara la letra. En 1976, tras dar un concierto en la ciudad gallega de Vigo, muere en un accidente automovilístico, un triste final que no es muy distinto de lo que les ocurrió al enorme Nino Bravo y, ya en pleno siglo XXI, a Pedro San Martín, bajista del grupo indie La Buena Vida. "Un ramito..." también fue cubierta por Manzanita y por la uruguaya Natalia Oreiro, y no es la única traca suya que ganó prestigio con el tiempo: similar cosa pasó con "Desde que tú te has ido", repopularizada por Mocedades; Luciano Pereyra también la cubrió. La presencia prematura de los celos de parte del hombre, y el triunfo de la magia en forma de unas flores que a la larga él le mandaba a ella, cada 9 de noviembre/como siempre sin tarjeta, es el motivo para una pieza del cancionero pop hispanoparlante que se valora hasta el día de hoy.