03 septiembre, 2017

DOS AÑOS SIN EL GURÚ: 4) en Fort Lauderdale

Sin duda uno de los momentos más felices en la vida y la carrera futbolística de Eduardo Bonvallet fue cuando jugó en la primera liga de soccer en Estados Unidos. El país de Walt Whitman trataba de estar en sintonía con la pasión popular del resto del planeta, formando un torneo en el que intervenían grandes figuras que ya estaban quemando sus últimos cartuchos, como era el caso de Pelé o Franz Beckenbauer. A comienzos de los 80, el Gurú aterrizó en los Strikers, equipo oriundo de Fort Lauderdale, una de esas ciudades menores ubicadas en el estado de Florida. Tuvo como compañeros a Teófilo Cubillas, Elías Figueroa y otro alemán de oro: Gerd Müller, más conocido como el Bombardero de la Nación. Los Strikers lograron ser campeones en una temporada, venciendo en la final a los Washington Diplomats, con dos golazos del propio Bonvallet (que solían aparecer en la intro del programa Bonvallet en La Red, con los guitarrazos de Joe Satriani de ubicuo fondo). Fue ídolo a un gran nivel, siendo bautizado como "El Hombre Biónico", y quedando como el mejor en las pruebas de resistencia física. En un baby fútbol una vez estaban Eduardo y Müller; el primero hizo el gol y el teutón se enojó porque él quería convertir, gritándole en perfecto alemán que era un vaca de mierda (dicen que en la lengua de Rammstein no hay muchos garabatos). Luego el Bonva estuvo en otro equipo gringo, los Tampa Bay Rowdies, donde tuvo un paso menor. Norteamérica conoció el talento del más grande.

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