MINIMALIAS Y MAXIMALIAS: Salfate rastreando mensajes "sheshuales" en los dibujos animados

ASÍ SOMOS, programa trasnochador de La Red que últimamente ha privilegiado la conversa (para ver más cachondismo directo, mejor vaya donde el Pollo Valdivia, o sea al TOC SHOW que dan en UCV TV), insistió anoche en un asunto muy curioso. Juan Andrés Salfate hablaba sobre mensajes obscenos o alusiones al sexo en dibujos animados que a los ojos de muchos han parecido muy sanitos. Entre los ejemplos hay material del Pato Donald, Los Pitufos y otros. Pero me quiero detener en su abordaje de Los Picapiedras. Primero se destacó una escena en que Pedro hablaba de "las tres cabezas", talla de corte fálico. Después, otra donde aparece Pebbles, la hija que tuvieron Wilma Traca y su gruñón maridito, jugando en su cunita y gritando algo que Pedro interpreta como "papi está fingiendo"; pero si uno se fija mejor lo que de veras dice la pequeña Picapiedra es otra cosa: WHAT THE FUCK!, que traducido al chileno significa algo así como ¡y qué hueá! O sea, que la linda Pebbles igual guardó un lugar para la cochinada en sus maneras dulces. No vamos a hacernos los lesos: en la existencia de esta memorable serie de monos hay un par de elementos que vale la pena repasar. Como Los Picapiedras eran transmitidos en horario estelar cuando se estrenaron, Pedro Picapiedra y Pablo Mármol en comerciales le hacían el aguante a Winston, una marca de cigarrillos. Y años más tarde, con la TV a color ya oficializada, los esposos de Wilma y Betty fueron rostros de una cerveza llamada Busch. Para que vean que Los Picapiedras no eran tan para niños en verdad, ¿o tengo que recordarles otra vez las constantes parodias a los elementos y vicios del mundo contemporáneo evidentes allí?