MINIMALIAS Y MAXIMALIAS: lo que Salas hizo en 1998, Sánchez lo repite en 2003: ¡dejar a Inglaterra mordiendo el polvo!

Jorge Sampaoli, técnico de la Selección Chilena de Fútbol, señaló que para él y sus dirigidos el Mundial empezaba con este amistoso (¿habrá otro nombre más preciso para los partidos donde no se disputan puntos ni copas que no sea ésa?). Lo que se dice enarbolar una actitud ganadora constante, todo lo contrario de otros personajes como Nelson Acosta. Tal pensamiento tuvo un correlato positivo ayer, jugando con Inglaterra en el Estadio Wembley de Londres. Retrocediendo la cinta, en 1989 se empató allí a 0 (Roberto Cóndor Rojas atajó más que en toda su vida esa vez), y en 1998 se ganó por 2-0, con Marcelo Salas como goleador (el segundo tanto fue de penal). Y ayer se repitió la historia de ese febrero finisecular. Sólo que esta vez el verdugo del equipo inglés fue Alexis Sánchez, nuestro 7 (este sí es un siete para Chile, no la vieja amarga de Evelyn Matthei), que anotó primero a los 7 minutos de juego, consiguiendo cerrar una jugada donde Jean Beausejour y Eugenio Mena tocaron la pelotita antes que el jugador del FC Barcelona. El segundo gol llegó en los descuentos, todo un acierto donde el portero Forster se corrió al lado equivocado. Pobrecito él, y alabado sea nuestro Niño Maravilla, que deja otra vez a la Roja muy bien parada en Europa. La semana que viene, Chile marcha hacia el costado anglófono de Canadá, específicamente a Toronto, donde jugará otra vez con Brasil, justamente los anfitriones de la cita mundialera de 2014. Cosas grandes son las que proyectan nuestros peloteros. Y queremos que abracen la gloria.