PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: la gran carta de validez

GIANLUCA
Yin Yang
(Quemasucabeza, 2019)



/SENTIMENTAL TRAP/ Es todo un festejo ver cómo crecen los referentes de la nueva escena urbana chilena. DrefQuila sacó por Warner aquel AQUA (2018) y se hizo notar en el Lollapalooza local de este año. La Princesa Alba ha demostrado ser un caramelo pop con Francisco Victoria como aliado en producción, llegando a sonar a ratos como una nueva Javiera Mena -no sólo por haber cantado "Al siguiente nivel" para un especial del Día de la Mujer en Los 40. Pablo Chill-E colaboró en un sencillo del español Yung Beef. Paloma Mami hizo lo propio con C. Tangana en la muy sensual "No te debí besar". ¿Y Gianluca? De eso tenemos que hablar aquí. El sanmiguelino ya se ha hecho respetar con las tracas de dos mixtapes: SSR (2017) y G-LOVE (2018), más el EP Vortex (2017), donde no son pocos los instantes que pueden calificarse de himnos sólidos: "Modélame" (MSHLBTS presente, el mismo beatmaker que apañaba a la Alba en "Diamantes"), "Bart", "Libre" o esa "Siempre triste" que para sorpresa de cualquiera fue objeto de una columna firmada por Antonio Gil en Las Últimas Noticias. El desafío para Gianluca este año era buscar un empaque más profesional, más pulido. Para eso confió en Pablo Stipicic, quien le dio otro punto de apoyo (alabado sea el sabio Arquímedes), y así es como el héroe trapero nos pone a mover y a pensar, trazando otro diario de divagaciones, penas de amor, apuntes de erotismo vampiresco ("Tú (pt. 2)") y esa esperanza final con voces femeninas maximalistas llamada "Hábitat". Llamemos a esto sentimental trap. La soledad del corredor de fondo en estos días de contactos por redes sociales se parece a los ambientes que Abarza propone, pero de todos modos hay presencias que refuerzan la contextura de este álbum. La del mencionado Pablo Chill-E en "Sismo". El ibérico Pedro LaDroga en "Felicidad deshecha". Gepe en "La lluvia", que agrega una guitarra sicodélica tipo Los Ángeles Negros. Incluso Javiera Mena aparece en la propia "Yin Yang", que pone a convivir sin problemas el trap con el electrohouse; su universo y el de la ex Prissa encajan. Los únicos capítulos reggaetoneros acá son la bellísima "Flotando" y la confesatón de "Solo", más páginas valiosas en un trabajo de confirmación, la carta de validez que no debe mirarse a huevo. Su Ying y su Yang aportan por igual.