tengo un fajo de billetes manchados con sudor y lágrimas.
cuando llegue del trabajo los tengo que lavar
con detergente extra, un poco de jabón y escobilla.
la idea es que cuando lleguen los negociantes
los encuentren limpiecitos, planchaditos y estiraditos
para que no sospechen de ningún modo que los conseguí
turbiamente.
es que en este mundo hay que guardar las apariencias:
es sabido que como te ven te tratan
y en cualquier momento todo va a estallar
y por mientras todos vamos marchando hacia el abismo
sin saber
siquiera
cómo defendernos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
PAPELERÍA (o poesía): Del año
Llegando a este punto me pregunto si en el año que comienza los sueños y fantasías se detendrán hasta nuevo aviso. Puede que ese proces...
-
Como ya lo dije aquí una vez, preguntaba cómo se llamará la modelo que ha aparecido durante los últimos años en campañas de Tricot . Y ten...
-
Alejandra Díaz Palestini es una favorita de la casa. Por lo mismo hay que destacar que ya ha puesto en marcha su nueva página web: www.alej...
-
Una de mis mayores aficiones en la vida es acordarme de actrices de las que nadie se acuerda. Pongo el ejemplo de una chica llamada Arantxa ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario