22 octubre, 2017

PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: la alegría de la huerta


KAMILA GOVORCIN
Feria Celadores 8
Centro Cultural Matucana 100
sábado 21 de octubre

Ayer fue un sábado especial, más especial que cuando el gordo Jorge Aedo nos pasaba videos de Metallica, R.E.M. o Depeche Mode, más especial que cuando Mega retransmitía de MTV los programas de Alfredo "Radiotransmisor" Lewin o Beavis y Butt-Head, más especial que cuando veíamos a Don Francisco preguntar: ¿dispara usted o disparo yo? Ahora sí que lo fue. Estaba presente en la última Feria Celadores de la historia, esa instancia para conseguir a buen precio discos en distintos formatos, libros, poleras y otras cosas (incluso regalaban chocolates que en algún momento pensé se vendían como todo lo demás), además de to-to-tomar cerveza (Colibritany dixit) y escuchar a distintos exponentes: allí se congregaban el trapper Gianluca, Ozorezan, MKRNI, Lerdo (en su momento teloneros de Faith No More, no es poca cosa) o los Políticos Muertos. Pero también había espacio para la electrónica en el ambiente instalado en una huerta que da a la esquina de Matucana con Portales, pegada a una micro donde sirven postres. Se supone que vería a Columpios al Suelo en ese instante, pero los del EP Un Día Afuera (Fisura, 2017) retrasaron lo suyo en el Espacio Patricio Bunster, así que opté por concentrarme en Kamila Govorcin, una señorita que viene pegando fuerte como DJ, y publicando temas desde Panal Records, entre ellos los de su reciente álbum EL MUNDO. El piso con tablones era relativamente inseguro, ergo temí más de una vez por la salud de mis piecitos, sin dejar de moverme con fuerza. Ritmos como los que la chica lanza exigen una atención verdadera. Los minutos fueron pasando. La muchachada no dejaba de apañarla. Techno, house, electro de postura breakdancer, algún remanso ambient, órganos puntuales, trazas robóticas, piqueros espaciales de melodía reconstituyente, todo en una hora excepcional que deja a la Govorcin como un valor al alza en el Chile electrónico del nuevo siglo, más allá de la EDM lucrativa. Hace poco estuvo aquí mismo para la réplica local del Dekmantel holandés, organizada por Club Sauna. Y pronto irá al Fauna Primavera para seguir rociándonos con su esencia rotunda. Ella es la alegría de la huerta. Y quiero volver a moverme con ella. Así será.

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