CAJA MALDITA: Don Diablo, tonterías que funcionan

Nunca estaré seguro de si hay que alabar o condenar, tal como dictaban en el circo romano, a Álex Hernández, por consolidar una forma de dirigir en la televisión basura. Se procupa de las cifras en el people meter tanto como Gonzalo Bertrán (QEPD), diseñando contenidos entretenidos sin fondo alguno, como ocurría en Mekano, convirtiendo a simples jovencitos en personajes aptos para la hoguera de las palabrerías. Mucho dio de sí ese ciclo en Mega, y la prolongación de eso la tenemos desde fines de 2007, con la arremetida de YINGO; originalmente sería sólo una competencia benéfica, pero en el camino la carreta flojeaba, por lo tanto había que buscar el rating ganador con la banalidad mekanizada: de otro modo no se le habría dado tanta pelota a Arenita Rodríguez o al fumado Lelo (ambos fuera del programa)...

Y si Mekano prolongaba su battlefield con miniseries donde sus "estrellitas" alternaban junto a actores hechos y derechos, la factoría yinguista lo hace también, con Amor Virtual como precedente, ofreciendo la historia de DON DIABLO (Chilevisión, lunes a viernes 20:30). Insisto con la cantaleta del principio: no me atrevo a crucificar a Hernández de forma extrema (aunque YINGO mismo me sea vacuo en un 95%), pero sí me aventuro a señalar que este nuevo experimento, o si quieren llámenlo teleserie chunga o melodrama semi amateur, se ve mejor facturado que cualquier intento previo, aunque sea una tontería también. Bizarro me parece que Ángel Bonilla, interpretado por Karol Dance, aparezca como el hijo de un Luciano (Felipe Armas) que: 1) ¡es el mismísimo Satanás!, y 2) ¡llega a ser compañero de colegio suyo! Más raro aún es que en la trama se hable de una Bola de Todos los Tiempos, un amiguito de Ángel use anteojos especiales para ver a las chicas en lencería, Cata Palacios asuma otro rol paranormal como el que hizo en Magi-K (un ángel guardián llamado Blanca), el profesor Jaime Campusano actúe sin olvidarse de su ser académico (¡citó a Víctor Hugo!), el glorioso Ratoncito del CLUB DE LA COMEDIA (Rodrigo Salinas) aparezca, o que Ricardo Lagos Weber haga un cameo. Mención aparte para Carolina Mestrovic, Malena en la serie: no actúa como para darle un Altazor, pero con uniforme escolar, con pijama o mostrando más piel induce, cosita, a la pérdida de baba segura. A veces me pregunto si no me estupidizo al mirar DON DIABLO cuando no pesco PRIMERA DAMA (Canal 13), y por el momento borro cualquier respuesta. Una colección de tonterías bien hechas: ese es el diagnóstico en torno a esto. El método Hernández funcionando al completo.