PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: se va al otro mundo Malcolm Young, miembro esencial de AC/DC

Para Patricio Córdova



Ayer salía de mi trabajo, me puse a almorzar y prendí la radio. Sintonizando la Sonar FM, escucho al maestrísimo Alfredo Lewin decir que se murió Malcolm Young, hermanísimo de Angus Young, uno de los miembros fundamentales de esa gran institución del rock durete que es AC/DC. Eso mismo, no es chiste. Un pilar clave dejó este mundo, tras ser diagnosticado con demencia senil. Lo cierto es que a los anglo-australianos que han creado discos extraordinarios como HIGHWAY TO HELL (1979) o BACK IN BLACK (1980) el tiempo y el desgaste les están pasando la cuenta. Brian Johnson, segundo cantante histórico tras el deceso (por ahogarse en su propio vómito) de Bon Scott, ya no podía subirse a ningún plató porque se está quedando sordo, y Axl Rose, voz de los Guns N´Roses, lo ha reemplazado con resultados positivos. O sea, que las cosas se complican. ¿Será que a los acedecé les llegó el momento de bajar la cortina, o pueden aguantar con reemplazos puntuales, alargando lo mismo el de Axl? Como la mayoría de las veces, el paso del tiempo es el mejor juez. Sólo queda seguir honrando el legado de unos monstruos que nos han dado innumerables momentos de diversión, con una banda que no pretendía hablar de cosas taaan profundas, sino de dar la vida por el rock mismo, de turbiedades a bajo precio, de darle un huesito al perrito, de buscar el calor para que se le pare a uno, del golpe del trueno, de subirse al tren del rocanrol, de rendirle tributo al César de turno... Malcolm tomó la carretera al cielo, o al infierno, o a cualquier parte, para juntarse con Bon y tomarse una wena. Clarete. "Have a drink on me". Nos tomamos un copete por él. Por AC/DC. Por el rock duro clásico. Por la grandeza de la música. Ya lo decían ellos, el rocanrol no es mera contaminación acústica: ¡el rocanrol es sólo rocanrol! Y nada más.