PUNTEOS, LOOPS Y DEMASES: la Victoria es suya y nuestra

VICTORIA MUS
El Disco de la Victoria
(Cetro, 2012; Ponk, 2014)

/POP/ Durante la temporada 2012 quien escribe estas líneas andaba más pendiente, en lo que respecta a discos chilenos, de cosas como el GP de Gepe, ACUARIO de Manuel García y FUEGO EN LOS ANDES de Angelo Pierattini. En esa cosecha también apareció el segundo disco de Francisca Aguilar Stange, más y mejor conocida como Victoria Mus. Antes estaba A UN PASO (2010), mini-LP para descarga gratuita que ya enamoraba sin dudarlo: las caricias de "Tienes que volver", "De cordillera a mar" (sencillo de costuras tan pero tan Olivia Newton-John) y "Te llaman dolor" eran puertas de entrada mágicas allí. Dos años más tarde EL DISCO DE LA VICTORIA salía a la luz, pero esa luz no fue tan correspondida en su momento. Hablamos de un álbum que pudo haber salido en Sello Azul, si hubiera ganado la convocatoria de la SCD donde participó. Cosa no menor, aunque queda como espaldarazo que los videos de "Quiero ser ella" y "Cherry brandy heart" tuvieron rotación en MTV y VH1.

Para que no olvidemos que Victoria Mus sigue adelante contra viento y marea, este DISCO DE LA VICTORIA pasa por el rito de la reedición. Una segunda oportunidad para los que no lo pescamos en su nacimiento, regresando a Ponk, label creado por Sokio Díaz que lanzó en su momento A UN PASO. Lo que abunda en este victorioso cartapacio es el pop de melodías que se derriten en los oídos, golosinas bien fabricadas, de finas terminaciones sintéticas, terrenales y celestiales por igual, llenas de sentimiento. El orden de los temas en esta repesca 2014 es distinto al de la edición príncipe, mas eso no altera la legitimidad de Victoria cuando toma el micrófono y saca todo lo que viene de su corazón, desde el citado tema "Quiero ser ella" (viene por igual la radio edit) en adelante, con los toques muy Depeche Mode de "Bajo tierra", el ejercicio soul muy brillante de "Atado a mí", la andadura con piano de "Tormenta", el exquisito chachachá synth de "Café caramelo", el dinamismo de "Muy pronto" y la vuelta del piano pero más desnudo en la angloparlante "Cherry brandy heart" (vale, parece un poco de Fran Valenzuela) como momentos a subrayar. Se agregan dos remezclas: "Muy pronto" llevada a territorio dubstep por Antiéroe y "Quiero..." repasada por Monsieur Hardy. Justa reivindicación de una intérprete pop que merece más y más cariño. La Victoria es suya y nuestra, que se diga.

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