Anoche se realizó en la ciudad portuguesa de Lisboa la final de Eurovisión, esa competencia de canciones que involucra a todos los países cuyas televisoras están asociadas a esa misma red europea. Y pasó lo que muchos habían adelantado: el triunfo fue para Israel, país que fue representado por Netta Barzilai y su tema "Toy". Uno de los detalles importantes tras esta victoria fue que detrás de esa pieza estaba un personaje que escribió antes dos temas que también llegaron a la competencia, y ahora sí le pega el palo al gato. Lo otro a destacar es que Netta es una intérprete de aspecto robusto que rompe con los parámetros de belleza obvios, reivindicando a los gordos como seres llenos de gracia, tal como ha pasado con Adele, ALMA (la muchacha regalona de DJ´s como Felix Jaehn o Martin Solveig) o el británico Rag´N´Bone Man (su "Human" fue elegida por la emisora rusa Europa Plus como mejor canción de 2017, superando en el voto popular al "Despacito"); que les sirva de lección a los de Revista Viernes de La Segunda, quienes discriminaron a la ensayista Andrea Ocampo por su gordura. Finalmente, el argumento principal: "Toy" apunta alto como un himno bailable contra el bulling que incluso se vale de una cuestión cacofónica: esos cacareos que los matones o los populares les hacen a los más timidorros como sinónimos de llamarlos "gallinas". Mezcla entre la Jennifer Lopez de "On the floor", los Ylvis de "The fox" (esa graciosa parodia a Guetta que incluso inspiró un jingle de Movistar) y la melodía de "Seven Nation Army" (The White Stripes; esos compases), instala una sentencia clara: I´m not your toy. O sea, no estoy pa tu hueveo. Salvador Sobral, el lusitano que ganó en 2017, la catalogó como horrible. Los desprejuiciados aplaudimos de pie, porque en el superpop de hoy el frikismo es una virtud que hay que saber llevar. Felicitaciones a Netta. Ya era hora que de Israel saliera alguien especial, que lo mismo estamos hartos del canalla de Benjamin Netanyahu.
Cuento aparte fue la participación de España. La RTVE hizo una eliminatoria con los últimos participantes del resucitado OPERACIÓN TRIUNFO (mire usted que mañana pasa algo similar con ROJO por estos lados), de la que salió "Tu canción", pieza interpretada por los noviecitos Alfred y Amaia, cerca del "Make me (cry)" de Noah Cyrus (sí, la hermanísima de Miley) con Labrinth. En la final de anoche le tocó el segundo turno, y acabó en el puesto 23°. Los ibéricos tendrán que esperar otro año más para ver si logran vencer como cuando estaba Massiel, o por lo menos salir segundos o cuartos, que eso es lo que pasó el 73 con "Eres tú" de Mocedades o el 91 con "Bailar pegados" de Sergio Dalma respectivamente.
Para cerrar, una idea. En Eurovisión suelen invitar a Japón y Australia a competir. ¿Y por qué no hacen eso con Chile? Me imagino a una Vesta Lugg o a una Francis Fellizeri dándolo todo. Tal vez ganaríamos.
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