1° manic street preachers/ "orwellian"
Alberto Mayol escribe en BIG BANG (2019): Ir al trabajo no es un trabajo, es la aventura de vivir en el apocalipsis, observando la magnitud de los daños. Esa interpretación sobre el estallido social chileno encuentra su conexión con lo que los galeses cuentan. James Dean Bradfield (quien en 2020 sacó EVEN IN EXILE, disco solista inspirado a grandes rasgos en la historia de Víctor Jara) describe un presente orwelliano, que podría ser el nuestro o el de los populismos derechistas o el de la pandemia, donde el futuro lucha con el pasado y los libros empiezan a arder. Y más que experimentar el apocalipsis laboral, se percibe como espacio de coexistencia. "Orwellian" se delinea con arreglos de piano cercanos a ABBA o Joe Jackson, caballo de batalla de un álbum como THE ULTRA VIVID LAMENT, con el que vuelven a ser #1 en las listas británicas de discos, algo que antes sólo lograron con THIS IS MY TRUTH TELL ME YOURS (1998). No cabe duda que esto es un clásico instantáneo.
2° zahara/ "merichane"
PUTA, el último álbum de la oriunda de Jaén, es una confesatón excepcional con revestimiento electrónico, yendo de lo abstracto o industrial a lo bailable. Y "Merichane" (sinónimo de "la puta del pueblo") impacta por el detallado de momentos complicados, con la culpa cristiana, la evasión promiscua, el abuso y el no saber cómo salir, todo en versos que suenan chocantes pero acaban siendo coreables. El yo estaba ahí de Zahara resuena doloroso, sin la chulería de LCD Soundsystem ("Losing my edge"). La andaluza demuestra valentía. Aunque a los fachas de Vox les joda eso.
3° mogwai/ "ritchie sacramento"
AS THE LOVE CONTINUES alcanzó lo que ningún álbum de los escoceses esperaba rozar: liderar las listas de discos en UK. Tal vez sea porque lo último de Mogwai suena 100% a ellos, pero cada vez más accesible. "Ritchie Sacramento" se vale del noise pop de toda la vida, con el volumen alto, tan alto como el misterio cristalino que se invoca. Glasgow los hizo así.
4° danna paola/ "calla tú"
La mexicana decía en 2020 a GQ: He aprendido a a hacer caso omiso de ciertas cosas, pero si me agarran en mis cinco minutos, ya no voy a callarme. Esa actitud es la misma que plasma en un tema contra las relaciones tóxicas, bajo el signo del perreo dramático (¿el efecto Rosalía?), himno que mantiene ese halo de resistencia feminista actual.
5° olivia rodrigo/ "drivers license"
O cómo una jovencita de la ignota ciudad de Temecula habla de lo que duele perder a ese amor que se proyectaba, con los paseos en auto tan esbozados. Fue el primer paso hacia SOUR, un debut en largo que mantiene las deudas conocidas con Taylor Swift o Paramore, pero siempre mostrando a Olivia como una figura en noble desarrollo.
6° meduza feat. elroii/ "headrush"
No sólo Maneskin son lo más desde Italia: también lo son Meduza, quienes dejan ese house hedonista bordado con los Goodboys en "Piece of your heart" o "Lose control", y se pasan a un electro oscuro con el recitado angustioso de Elroii. Se vale acordarse del Felix Da Housecat de 2001. Baile con intríngulis.
7° arab strap/ "the turning of our bones"
Moffat y Middleton volvieron a la carga con AS DAYS GET DARK, donde conservan su libro de estilo que da gusto. La presente apela a la fatalidad con un leve toque bailable, lo que confirma a estos otros escoceses como apóstoles de lo confesional.
8° low/ "more"
HEY WHAT empuja al matrimonio Sparhawk/Parker a seguir tratando las canciones como arfefactos oscuros, trozos que adosan las voces a un ambiente enrarecido. "More", en sus dos minutos precisos, muerde y destila ese veneno sin falsedad.
9° ms nina/ "si quieres"
La argentina radicada en España aborda el porsilaponguismo en otra dosis de perreo con toque cumbiero. Yo inventé este juego/dame un cariñito y hasta luego, dice la Nina, sabiendo que hay mucho caballero de cartón piedra.
10° billie eilish/ "your power"
La hermana de Finneas con un halo folk que la favorece. Aquí como en el resto de HAPPIER THAN EVER, la Eilish triunfa yendo por caminos tradicionales más allá de la electrónica con subgraves. Ella tiene el (susurrante) poder.
Y PRONTO SE VIENE EL RESTO DE LA LISTA, DEL ONCE AL CIEN.
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