José Miguel Oviedo es un ya reconocido crítico literario y profesor, estudioso de la obra de gente como Mario Vargas Llosa y José Martí, y que hace poco formó parte del jurado que anunció la entrega del Premio Iberoamericano Pablo Neruda, aquí en Chile, al poeta argentino Juan Gelman.
También es autor de algunas novelas y de conjuntos de relatos, entre los cuales está LA VIDA MARAVILLOSA (Tusquets, colección La Flauta Mágica, 1988), que hace unos días terminé de leer. Este libro de más de 200 páginas no sólo está compuesto de piezas narrativas propiamente tales; de igual forma se incluye una sección de apuntes y aforismos, titulada "Esquirlas" y dedicada a Augusto Monterroso. Oviedo somete a su propia escritura a una mutación, pasando de las narraciones más elaboradas a las esquirlas que ya citamos. Los 2 primeros cuentos, que forman parte del bloque Apólogos, "El desesperado" y "La última fiesta" son muy escalofriantes, y ese aliento perverso siempre partiendo de un hecho común los sostiene de punta a cabo.
El segundo bloque, Imaginario, tiene historias o anécdotas que se sostienen de otro modo, y cabe destacar que uno de ellos llega a esa confusión que tanto Borges como Cortázar consiguieron alguna vez, entre lo real y lo irreal. Más que nada, LA VIDA MARAVILLOSA es un volumen redondo, de esos que a uno lo hacen seguir creyendo en el placer de leer, a pesar del peso infame de escribir.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
PAPELERÍA (o poesía): Del año
Llegando a este punto me pregunto si en el año que comienza los sueños y fantasías se detendrán hasta nuevo aviso. Puede que ese proces...
-
Como ya lo dije aquí una vez, preguntaba cómo se llamará la modelo que ha aparecido durante los últimos años en campañas de Tricot . Y ten...
-
Alejandra Díaz Palestini es una favorita de la casa. Por lo mismo hay que destacar que ya ha puesto en marcha su nueva página web: www.alej...
-
Una de mis mayores aficiones en la vida es acordarme de actrices de las que nadie se acuerda. Pongo el ejemplo de una chica llamada Arantxa ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario